¿Sabías que la mamoplastia de aumento es una de las cirugías plásticas más solicitadas a nivel mundial? Especialmente por mujeres que desean realzar la forma y el tamaño de sus senos. Pero lejos de ser únicamente un procedimiento estético, también puede tener un impacto positivo en la autoestima y la confianza personal.
Por ello, en la Clínica Obesidad y Envejecimiento, dirigida por el Dr. Gabriel Cubillos, este procedimiento se lleva a cabo con un enfoque integral que prioriza tanto la seguridad como los resultados naturales. Si quieres informarte más a fondo sobre este procedimiento quirúrgico, no pierdas detalle de la siguiente información.
¿Qué se entiende por mamoplastia de aumento?
Se trata de una intervención quirúrgica cuyo objetivo es aumentar el volumen de los senos mediante la colocación de implantes mamarios, idealmente con implantes de silicona. Si bien estos pueden ser de diferentes materiales y formas, lo que permite personalizar el procedimiento según las expectativas de cada paciente.
La elección del tipo de implante, el tamaño y la técnica quirúrgica depende de factores como la anatomía de la paciente, la elasticidad de la piel, la complexión corporal y los objetivos estéticos planteados durante la valoración médica.
¿Cómo se realiza la cirugía para el aumento de senos?
La mamoplastia de aumento se lleva a cabo bajo anestesia general y suele durar entre 1 y 2 horas, dependiendo de la técnica seleccionada. De manera general, el procedimiento incluye los siguientes pasos:
- Incisión quirúrgica
Puede realizarse en diferentes zonas, como el surco inframamario, alrededor de la areola o en la axila. La elección se hace con base en la anatomía y en la preferencia tanto del cirujano como de la paciente.
- Colocación del implante
El implante puede ubicarse detrás del tejido mamario o debajo del músculo pectoral. Cada opción tiene ventajas específicas en cuanto a la proyección del busto, la recuperación y el resultado estético.
- Cierre de la incisión
Una vez colocado el implante, se cierran las incisiones con suturas finas y se cubren con apósitos para favorecer la cicatrización. El objetivo principal es lograr un resultado armónico que mantenga la proporción con el resto del cuerpo y, al mismo tiempo, que se adapte al estilo de vida de la paciente.
Conoce los plazos de recuperación
Uno de los aspectos más importantes para tener en cuenta es el proceso de recuperación. Aunque cada organismo responde de manera distinta, existen tiempos generales que permiten tener una idea clara de lo que la paciente puede esperar:
- Primeros días: tras la cirugía es normal sentir inflamación, dolor moderado y sensibilidad en la zona tratada. El uso de un sostén post quirúrgico es clave para brindar soporte y facilitar la cicatrización.
- Primera semana: la mayoría de las pacientes pueden reincorporarse a actividades cotidianas ligeras. Se recomienda evitar esfuerzos físicos y movimientos bruscos con los brazos.
- De 2 a 4 semanas: la inflamación empieza a disminuir y los resultados iniciales se hacen más visibles. Todavía es importante mantener reposo relativo y seguir las indicaciones médicas al pie de la letra.
- De 6 a 8 semanas: en la mayoría de los casos, las pacientes pueden retomar la actividad física y laboral con normalidad, siempre bajo autorización médica.
- Resultados definitivos: aunque el cambio es notorio desde el inicio, los resultados finales suelen apreciarse a partir de los 3 a 6 meses, cuando los implantes se asientan y los tejidos se adaptan.
Cuidados posteriores fundamentales
Pero el éxito de la mamoplastia de aumento no solo depende de la técnica quirúrgica, sino también de los cuidados posteriores. Algunas recomendaciones habituales incluyen:
- Mantener el uso del sostén post quirúrgico el tiempo indicado.
- Evitar la exposición directa al sol sobre las cicatrices durante los primeros meses.
- Cumplir estrictamente con los controles médicos posteriores.
- Seguir una dieta equilibrada que favorezca la recuperación de los tejidos.
- Evitar el consumo de alcohol y tabaco, ya que pueden interferir en la cicatrización.

Clínica Obesidad y Envejecimiento: un acompañamiento profesional
Optar por una mamoplastia de aumento es una decisión personal que debe estar acompañada de información clara y asesoría médica de confianza. No se trata únicamente de mejorar la apariencia física, sino también de garantizar la seguridad y el bienestar integral de la paciente. Por ello, es esencial elegir un equipo especializado con experiencia comprobada en cirugía estética. La preparación previa, la tecnología utilizada y el seguimiento posterior hacen la diferencia entre un resultado satisfactorio y posibles complicaciones. En la Clínica Obesidad y Envejecimiento, contamos con la dirección del reconocido Dr. Gabriel Cubillos, donde se evidencia que la mamoplastia de aumento se realiza con altos estándares de seguridad y un enfoque personalizado para cada paciente. ¿Te gustaría conocer más aspectos sobre cómo mejorar la forma y la apariencia de tus senos? Puedes contactar a nuestro equipo especializado y estar al tanto de todo lo que necesitas.
Preguntas frecuentes (FAQs)
Generalmente, la mayoría de las pacientes puede reiniciar actividad ligera en la primera semana y ejercicios más intensos entre 6 y 8 semanas, siempre bajo autorización médica.
Las incisiones pueden hacerse en el surco debajo del seno, alrededor de la areola o en la axila. La ubicación se elige según anatomía y preferencias, buscando minimizar cicatrices visibles y favorecer una cicatrización armoniosa.
Sí, es habitual experimentar inflamación, sensibilidad y dolor moderado los primeros días. Estos síntomas disminuyen progresivamente siguiendo los cuidados posquirúrgicos recomendados.
La planificación personalizada del tamaño, forma del implante y técnica quirúrgica, considerando la complexión y proporciones del cuerpo, ayuda a lograr un resultado armónico y natural.
Usar el sostén post quirúrgico, evitar sol directo en las cicatrices, cumplir controles médicos, mantener una dieta saludable y no consumir alcohol o tabaco son claves para una cicatrización adecuada.
Aunque el cambio inicial es visible desde el principio, los resultados finales suelen apreciarse entre 3 y 6 meses, cuando los implantes se asientan y los tejidos se adaptan completamente.